Los barrios y las ciudades son el motor de la innovación social, un fenómeno que es una amalgama de procesos para incrementar la solidaridad, la democracia y el bienestar. Así lo explican los profesores Frank Moualert (Universidad de Lovaina) y Marisol García (Universidad de Barcelona) especialistas en este fenómeno y que protagonizaron en el Palau Macaya la V Sesión del Ciclo “Combatre les Desigualtats: el Gran Repte Global” que organiza la Fundación Catalunya Europa.
Moulaert sostiene que la innovación social actual no puede entenderse si no es desde una perspectiva histórica. Se trata de un fenómeno previo inclous a la innovación tecnológica. Durante el siglo XVIII, por ejemplo, la innovación social fue considerada revolucionaria, con una connotación negativa importante en la Inglaterra de aquel siglo, mientras que sus contemporáneos franceses lo miraban con buenos ojos.
Actualmente, el paradigma de innovación social que propone Moulaert incluye la utilización de mecanismos redistributivos para combatir las desigualdades y asegurar unos buenos niveles de democracia. Los barrios y las ciudades son los lugares propiciso que permiten la organización de movimientos que pueden liderar prácticas de innovación social, teniendo en cuenta que las experiencias más exitosas son las que consiguen crear sinergias entre el mundo empresarial, el político y el social.
Por eso Moulaert se ha mostrado muy crítico con el neoliberalismo y lo ha considerado una ideología "individualista e incapaz de gestionar los recursos públicos". el profesor belga también apuesta por medidas fiscales que no favorezcan los más ricos y que permitan asegurar un buen nivel de estado del bienestar.
Uno de los conceptos claves del paradigma de Moulaert son los llamados bottom-linked, es decir, la existencia de un diálogo permanente entre gobierno y sociedad civil que permita una mejora de la democracia y que priiorice las necesidades humanas por encima de otros intereses. es en este contexto que también aparecen las Áreas Integrales de Desarrollo, que incorporan aspectos como la economía social o la gobernanza comunitaria, con un interés especial por el sector cultural y la producción artesanal. Este tipo de organización promueve la creatividad social, especialmente entre organizaciones pequeñas y medianas con capacidad para poner en común recursos económicos y sociales con tal de generar una actividad económica sostenible.
En este sentido, la innovación social pone el foco en el mundo local para favorecer sociedades más cohesionadas a través de una variedad de expresiones que tienen en cuenta aspectos tan diversos como la democracia, la dignidad humana o la gestión de recursos financieros.
Para saber más: Frank Moulaert et al. "Social innovation as a Trigger Transformation"
