El economista Miquel Puig, coordinador del Comité Asesor Cataluña-Next Generation EU ha sido el ponente invitado de la segunda sesión del Café Europa dedicada a los Fondos Europeos Next Generation y la economía catalana. Café Europa es un ciclo de conferencias organizado por la Fundación Catalunya Europa junto con la asociación "Horitzó Europa". La sesión también ha contado con la participación de Marta Angerri, consultora y Presidenta de la Comisión Agenda 2030 de Fomento del Trabajo.
Puig explicó que el Gobierno español tiene previsto solicitar los 73.000 millones de fondos no retornables y, de momento, reuncia recabar los fondos sujetos a crédito. Un dinero que supone "más del doble de ingresos de lo que inyectó el Plan Marshall, sólo en esta legislatura".
La Unión Europea ha condicionado estas ayudas al cumplimiento de los objetivos de Next Generation, que se resumen con la consecución de una Europa "más digital y ecológica" y una economía "más sostenible y resiliente". España, además, ha añadido dos hitos adicionales, la igualdad de género y la cohesión social y territorial.
El economista considera que estos fondos son extraordinarios por tres motivos, en primer lugar, por el volumen que suponen, en segundo lugar, por el hecho que es la primera vez que la UE se endeuda y, porque finalmente la Unión rompe el tabú de la inversión de fondos públicos en el sector industrial. Aunque la pandemia ha propiciado las condiciones necesarias el acuerdo de los 27, lo cierto es que los fondos Next Generation ya estaban gestando desde antes de la Covidien-19, cuando Francia y Alemania comenzaron a negociar un acuerdo para financiar la industria europea y favorecerla frente al crecimiento de gigantes económicos como China.
Para Puig, una de las principales cuestiones a responder es si el gobierno español será capaz de adjudicar los 73.000 millones €. Sea como sea, las comunidades y los entes locales también tendrán un papel importante en su adjudicación y el gobierno central ya ha anunciado que éstos se ocuparán de la gestión de la mitad del presupuesto.
A pesar de estas dificultades, Marta Angerri no se muestra favorable a la creación de organismos de gestión de los fondos europeos ad hoc e insiste en aprovechar los recursos existentes para adjudicar los fondos Next Generation.
En Catalunya, la Generalitat ha presentado 27 ámbitos prioritarios de adjudicación del dinero de los fondos europeos. Aún así, éstos son muy generales y deben concretarse los proyectos. Para Puig, algunos de los proyectos ejemplares en Catalunya son la transformación de la industria automovilística en la fabricación del vehículo eléctrico, la investigación del hidrógeno verde (una industria poco desarrollada, pero que forma parte de las prioridades de la UE) o la transformación de la industria agroalimentaria para que sea más sostenible. Actualmente, dice Puig, sólo en Cataluña han presentado un millar de proyectos, que deberán analizar y evaluar para determinar cuáles de ellos se ajustan más a los objetivos a los que se supeditan los fondos Next Generation.