"Europa no se hará de una sola vez ni en una operación de conjunto: se hará gracias a realizaciones concretas que creen una solidaridad de hecho."
Con estas palabras de Robert Schuman, anunciando su propuesta de constituir una comunidad del carbón y del acero (CECA) el 9 de mayo de 1950, comienza el Manifiesto con motivo del Día de Europa elaborado por la Fundación Catalunya Europa.
Coincidiendo con la proximidad de un período clave, protagonizado por la presidencia española del Consejo de la Unión Europea y las elecciones europeas en junio de 2024, la Fundación Catalunya Europa hace un balance altamente positivo de la integración en la UE.
El Manifiesto que tiene disponible en la web recuerda cómo la solidaridad y la colaboración siempre han sido instrumentos fundamentales para la paz, el bienestar y la democracia en Europa, valores actualmente en riesgo ante la situación de guerra que vivimos en el continente.
Por eso, el Manifiesto considera que el Día de Europa es una oportunidad para hacer balance y definir nuevos compromisos, poniendo en valor el camino hecho hasta ahora y apuntando los retos a recorrer en el futuro.
Así, se afirma que "Europa no es un proyecto terminado. Se va haciendo -como decía Schuman- con "realizaciones concretas que creen una solidaridad de hecho". El objetivo último es la construcción de una Europa abierta al mundo, diversa y mestiza, avanzada tecnológica y culturalmente, defensora de las libertades y de los derechos civiles, sociales y económicos, con una distribución justa de la riqueza y solidaria con los pueblos del mundo".
"La UE sólo será relevante a escala mundial si se legitima ante la ciudadanía con mayor acción social, si da ejemplo de efectividad en política ambiental y si cuenta con un instrumento político más potente que el actual que garantice su autonomía estratégica en colaboración pacífica con los demás pueblos del mundo", dice otro de los fragmentos del Manifiesto.
Para la Fundación Catalunya Europa, éstas son algunas de las líneas de progreso inseparables:
- Reforzar la dimensión social de la UE mediante políticas de protección y mejora de los derechos sociales y económicos.
- Liderar la lucha contra el cambio climático y asegurar una soberanía tecnológica propia.
- Avanzar hacia una mayor integración política mediante una federación entre los estados miembros de la UE y con mayor participación ciudadana.
- Dar un papel más relevante a las ciudades y administraciones locales, que son la máxima expresión de la proximidad.
- Trabajar por una acción internacional europea en favor del desarrollo sostenible y en favor de la paz.
Por todo ello, la Fundación Catalunya Europa se compromete a estimular el debate, de manera especial entre los jóvenes, para construir y hacer posible la Europa que queremos, poniendo en valor los beneficios de formar parte de la UE, y llamar a la opinión del país, siguiendo la convicción, esperanzadora y optimista, de Pasqual Maragall, el fundador y presidente honorario de la Fundació Catalunya Europa.